El evangelio árabe de la infancia del Salvador

Y esta es aquella tinaja que compró María la pecadora y la derramó sobre la cabeza y los pies de nuestro Señor Jesucristo, que luego limpió con los cabellos de su cabeza.[6]

Comentario de Orígenes sobre Mateo Libro XII

después de esto, ya no prostituyéndoos, sino viniendo a los pies de Jesús, y mojándolos con lágrimas de arrepentimiento, y ungiéndolos con la fragancia del ungüento de la santa conversación, por causa del cual, reprochando a Simón el leproso, -el pueblo anterior, habló las cosas que están escritas.[32]

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Antiguo Testamento