1 Corintios 7:10-16

Con respecto al comportamiento de los casados 1 Corintios 7:10-16 : Pablo instruyó a las personas a permanecer casadas. Él dijo: "Que la mujer no se aparte de su marido". (1 Corintios 7:10 ) Los cristianos pueden tener problemas pero tienen que estar comprometidos el uno con el otro y con su matrimonio.

La iglesia tiene que ser un lugar donde las familias heridas puedan encontrar ayuda. Debemos recordar las palabras del Señor: "Por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre". ( Mateo 19:6 ) La inspiración también dijo: "Pero y si ella se separa, quede sin casarse, o que se reconcilie con su marido; y que el marido no repudie a su mujer.

( 1 Corintios 7:11 ) Lamentablemente, el divorcio puede ser inevitable para algunos cristianos. En el caso de que no haya adulterio, las únicas dos posibilidades son la restauración del matrimonio roto o permanecer soltero.

Algunos cristianos están casados ​​con no creyentes. La Biblia advierte contra los cristianos que se casan con no cristianos. Debemos casarnos solo con aquellos que nos ayuden a llegar al cielo. En Corinto había algunos que ya estaban casados ​​y solo uno se hizo cristiano. Esto creó muchas diferencias. Si el incrédulo está dispuesto a quedarse, el creyente no debe buscar el divorcio. Hay algunos casos en los que el incrédulo puede optar por dejar al creyente.

"Un hermano o una hermana no está sujeto a servidumbre en tales casos, pero a paz nos llamó Dios". ( 1 Corintios 7:15 ) No entiendo que esto signifique que él o ella ahora es libre para volver a casarse. Más bien, el creyente está libre de la responsabilidad de destruir el matrimonio. La meta del creyente debe ser salvar el matrimonio y el alma del cónyuge incrédulo.