Comentarios de Charles Box
Mateo 7 - Introducción
Una mirada a la autoridad de Jesús Mateo Siete
El capítulo siete de Mateo es la parte final de las Escrituras en esa sección conocida como el Sermón del Monte. Esta sección muestra la autoridad de Jesús cuando habló sobre temas tales como juzgar, orar, el único camino al cielo, ser conocido por su fruto, obediencia y edificar sobre la roca. En Su enseñanza, "Jesús les enseñaba como quien tiene autoridad". ( Mateo 7:29 )
Cuando Jesús habló de juicio, dijo que no debemos juzgar con dureza o precipitación. Muchos son capaces de ver pequeñas faltas en sus hermanos, pero pasan por alto las mayores en ellos mismos. Jesús llamó a las fallas motas y vigas. Antes de buscar fallas en los demás, primero debemos reformarnos y corregirnos a nosotros mismos.
Jesús nos enseñó a orar oraciones sinceras y ardientes. Debemos orar a menudo y con fervor. Jesús dijo: "Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá". ( Mateo 7:7 ) El trono de la gracia de Dios está abierto al hijo fiel de Dios. Los padres terrenales saben bendecir y responder a las peticiones de sus hijos. ¿Cuánto más Dios puede y está dispuesto a bendecir a Sus fieles hijos e hijas?
Solo hay dos caminos a seguir mientras viajamos por esta vida. Uno es el camino correcto y el otro es el camino equivocado. El camino angosto lleva al cielo y el camino ancho al infierno. “Muchos” recorren ese camino ancho que lleva a la destrucción. ¡Algunos "pocos" no viajarán por el camino ancho al infierno, sino que elegirán caminar por el camino angosto y recto! Caminando por el camino recto y angosto, una persona debe resistir la tentación y cumplir con su deber diario para Dios.
Nada aparta más al hombre del camino recto y angosto que la "falsa enseñanza". Debemos escuchar y aprender las enseñanzas de Jesús, creer en Él como el Cristo, arrepentirnos de los pecados, confesar el precioso nombre de Jesús, ser bautizados en Cristo y vivir una vida santa. Jesús, con Su autoridad, mandó a todo aquel que invocare el nombre de Cristo, que se aparte de la iniquidad. ¿Qué tipo de constructor eres? Edifiquemos nuestra vida sobre el sólido fundamento de Jesucristo y éste crucificado.
Cuando una vida está edificada sobre la roca nada nos separa del amor de Cristo. Jesús "les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas". ( Mateo 7:29 )