ANÁLISIS.
Dios os muestra un gran amor al conferiros el gran honor de ser
llamados hijos suyos. Ustedes son los hijos de Dios y, sin embargo,
les esperan mayores bendiciones. Seréis como él, y lo veréis tal
como es. Esta es una gran esperanza y una fuerte razón para
esforzarse por ser puro. Una vio... [ Seguir leyendo ]
VERSO 1. HE AQUÍ, QUÉ CLASE DE AMOR.
Recordando que el último pensamiento introducido en el capítulo
anterior fue el hecho de que nacimos de Dios. Cuán maravilloso ha
sido el amor de Dios al permitir y hacer provisiones para que
pudiéramos llegar a ser sus hijos. Aquí hay un amplio campo para la
me... [ Seguir leyendo ]
VERSO 2. AMADOS, AHORA SOMOS HIJOS DE DIOS.
El anuncio de que tenemos el privilegio exaltado de ser hijos de Dios
es seguido por un hecho aún mayor y más importante, que está
relacionado con esa relación, a saber: que no se manifiesta lo que
seremos. Nuestra recompensa y gloria futuras aún no se ha... [ Seguir leyendo ]
VERSÍCULO 3. Y TODO HOMBRE QUE TIENE ESTA ESPERANZA.
Todo cristiano fiel tiene esta esperanza. La esperanza de ser como el
Señor de la gloria y morar con él hará que NOS esforcemos por ser
como él. Cristo fue y es puro; por lo tanto, todo cristiano fiel se
esforzará por ser puro.... [ Seguir leyendo ]
VERSÍCULO 4. TODO AQUEL QUE COMETE PECADO.
La idea es, habitualmente o continuamente hace mal. Esta idea debe
tenerse en cuenta para que podamos comprender completamente otras
declaraciones contenidas en este capítulo y así asegurar una
perfecta armonía. Hacer, trabajar o cometer pecado es una
tran... [ Seguir leyendo ]
VERSO 5. Y SABÉIS QUE ÉL FUE MANIFESTADO.
Uno de los objetivos de la venida de Cristo al mundo fue para quitar
nuestros pecados, remitiéndolos; pero un segundo objeto que tenía
esa venida era, por su ejemplo y el curso de instrucción dado por
él, el cual, si lo persiguiéramos, quitaría incluso nues... [ Seguir leyendo ]
VERSÍCULO 6. TODO AQUEL QUE PERMANECE EN ÉL.
Manteniéndonos cerca de su ejemplo, con confianza, siguiendo
amorosamente sus instrucciones, permanecemos en él, y así,
permaneciendo en él, no pecamos; no tener disposición o deseo de
pecar.
TODO EL QUE PECA, NO LE HA VISTO.
Dejamos de permanecer en é... [ Seguir leyendo ]
VERSO 7. HIJITOS, NADIE OS ENGAÑE.
Aquí se hace una exhortación para evitar el engaño o la ilusión.
Los que dicen ser justos son los únicos que practican la justicia. Se
exigen obras en la economía del cielo para mostrar la existencia de
la fe. Los que permanecen en Cristo hacen justicia porque Cri... [ Seguir leyendo ]
VERSÍCULO 8. EL QUE PRACTICA EL PECADO ES DEL DIABLO.
Puesto que el pecado emana del diablo, y es, por lo tanto, de él,
aquellos que obran el pecado, que exhiben una vida pecaminosa, dan,
por ello, toda la prueba que la sana razón puede exigir de que están
bajo el dominio y control del diablo. Desd... [ Seguir leyendo ]
VERSÍCULO 9. TODO AQUEL QUE ES NACIDO DE DIOS, NO COMETE PECADO.
Aquí algunos no han captado la idea del apóstol. No es que los
nacidos de Dios estén tan fuera del alcance del pecado que la
tentación no pueda asaltarlos, sino que los nacidos de Dios no pecan
habitualmente ni viven una vida de pecad... [ Seguir leyendo ]
VERSO 10. EN ESTO LOS HIJOS DE DIOS.
Aquí se traza una clara marca de distinción entre los hijos de Dios
y los hijos del diablo. Es fácil distinguir uno de otro. El hijo de
Dios habitualmente realiza buenos actos, obras y obras, y ama con
verdadero afecto a su hermano, mientras que los hijos del di... [ Seguir leyendo ]
VERSÍCULO 11. PORQUE ESTE ES EL MENSAJE QUE HABÉIS OÍDO.
Cristo trajo del Padre, y nosotros los apóstoles proclamamos el
mensaje desde el establecimiento del reino en la tierra, que debemos
amarnos los unos a los otros. Este mensaje es dado por Dios; vino de
él, y esta era evidentemente la voluntad... [ Seguir leyendo ]
VERSO 12. NO COMO CAÍN, QUE ERA DE ESO.
Esto es lo opuesto al amor, es el odio. El odio es del diablo. Caín
fue, por lo tanto, engendrado por el diablo, es decir, tan controlado
como para hacer las obras del diablo. El hijo de Dios unigénito de
Dios ama y no odia. "Este aborrecedor y asesino es con... [ Seguir leyendo ]
VERSO 13. NO OS MARAVILLÉIS, HERMANOS MÍOS.
El apóstol dice aquí: No debemos maravillarnos, maravillarnos, si
somos aborrecidos por el mundo. Si bien no se da ninguna razón, el
versículo anterior indica la fuente de todo odio. El conflicto entre
el bien y el mal tuvo su origen temprano en la histor... [ Seguir leyendo ]
VERSO 14. SABEMOS QUE HEMOS PASADO DE MUERTE.
Si bien somos odiados por el mundo, esto no debe ser considerado por
nosotros, ya que sabemos que hemos pasado de un estado cuyo fin
último es la muerte eterna, a un estado cuyo fin es la vida eterna.
PORQUE AMAMOS A LOS HERMANOS.
Aquí se da la razón... [ Seguir leyendo ]
VERSÍCULO 15. CUALQUIERA QUE ABORRECE A SU HERMANO ES HOMICIDA.
Aquel que odia a su hermano está en un estado o condición, bajo una
ligera provocación influenciada por su pasión de odio, para matarlo.
Su odio es la semilla o germen del que se produce el asesinato. El
ejemplo de Caín, dado en un ver... [ Seguir leyendo ]
VERSO 16. EN ESTO PERCIBIMOS EL AMOR DE DIOS.
Cristo, por mandato de Dios, mostró su amor cuando entregó su vida
en la cruz. Teniendo su ejemplo delante de nosotros para nuestra
guía, si la ocasión lo requiere, debemos dar nuestras vidas por los
hermanos.... [ Seguir leyendo ]
VERSÍCULO 17. PERO EL QUE TIENE BIENES DE ESTE MUNDO.
Aquí se presenta un claro contraste. Si es cierto que debemos dar
nuestra vida por los hermanos, ¿qué se dirá de alguien que tiene
abundancia y, sin embargo, se niega a proporcionar a un hermano
necesitado las cosas necesarias para su socorro pr... [ Seguir leyendo ]
VERSO 18. HIJITOS MÍOS, NO AMEMOS.
Podemos afirmar que amamos a nuestros hermanos, y se presentan muchas
ocasiones apropiadas donde no se da ninguna manifestación externa: si
tal cosa fuera posible, sería amar de palabra o de lengua. Tal amor
no es aceptable. El amor debe demostrarse con obras; si... [ Seguir leyendo ]
VERSO 19. Y EN ESTO SABEMOS QUE SOMOS DE LA VERDAD.
Cuando nuestro amor se manifiesta en hechos, cuando es operativo o
activo, podemos saber con seguridad que estamos en la comunión de
Dios.... [ Seguir leyendo ]
VERSO 20. PORQUE SI NUESTRO CORAZÓN NOS REPRENDE.
Si somos deficientes en el amor a nuestros hermanos necesitados, lo
sabemos; nuestra propia conciencia así nos informa. Así nos
condenamos a nosotros mismos. Dios es más grande que nuestros
corazones, porque él sabe todas las cosas; su condenación e... [ Seguir leyendo ]
VERSO 21. AMADOS, SI NUESTRO CORAZÓN NO NOS REPRENDE.
Pero si nuestra conciencia no nos condena, es decir, no nos acusa de
ser deficientes en el amor a nuestros hermanos necesitados, tenemos
una conciencia sin ofensa hacia Dios, y estamos seguros de que él nos
escuchará, porque sabe que tenemos no... [ Seguir leyendo ]
VERSO 22. Y TODO LO QUE PIDAMOS.
Habiendo guardado los mandamientos de Dios, amando a nuestros hermanos
de hecho y en verdad, y actuando así de una manera que agrada a Dios,
sabemos que cualquier bendición que le pidamos, conforme a su
voluntad, la recibiremos.... [ Seguir leyendo ]
VERSO 23. Y ESTE ES SU MANDAMIENTO.
El mandamiento de que debemos creer en el nombre de su Hijo
Jesucristo, y amarnos unos a otros; creer que Dios envió a su Hijo al
mundo; el mismo Jesús que nació en el pesebre; que fue enviado para
salvarnos; tómalo, acéptalo como nuestro Profeta, Sacerdote y Rey... [ Seguir leyendo ]
VERSÍCULO 24. Y EL QUE GUARDA.
Al guardar los mandamientos de Dios tenemos comunión con él.
Nosotros habitamos con él, y él con nosotros.
QUE ÉL PERMANECE EN NOSOTROS.
El espíritu del Maestro que se nos da se manifiesta en nuestro
caminar diario. Si somos guiados por su espíritu, mostramos sus
fr... [ Seguir leyendo ]