Por tanto, sea yo o sean ellos, así predicamos, y así creísteis. La palabra predicar (derivada del latín praedicare , proclamar) ha adquirido ahora el sentido convencional de disertar públicamente sobre religión. La palabra usada por San Pablo se refiere al trabajo de un heraldo, la proclamación formal de asuntos de importancia por parte de alguien que fue comisionado para hacerlo. La identidad sustancial del mensaje, quienquiera que haya sido entregado inicialmente, es un hecho, como muestran claramente los escritos de los apóstoles y evangelistas. "Por su seriedad al decir esto, el Apóstol da testimonio del inmenso valor e importancia del cristianismo histórico". Robertson.

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