Levítico 14:33-53

Lepra en las casas (33 53)

No se sabe nada definitivo acerca de estas apariciones en las paredes de una casa, que aquí se describen como lepra. Era considerada como una visitación especial de Dios ( Levítico 14:34 , -Yo puse la peste"); los judíos creían que la peste era propia de Palestina y del pueblo escogido, y no se encontraba en las casas de los extranjeros.

El dueño de la casa debe decir -Me parece...” ( Levítico 14:35 ): la decisión de si la casa está leprosa recae en el sacerdote. La orden de vaciar la casa antes de que el sacerdote venga a inspeccionar muestra que no hay miedo al contagio Se ha sugerido que las apariciones se debieron a la humedad, a la descomposición, o al crecimiento de alguna materia vegetal.

El diagnóstico es similar al de la lepra en el hombre; el remedio es quitar las piedras en que está la plaga, y raspar y enlucir la casa. Si la plaga no se detiene, la casa debe ser derribada. El método de purificación si la casa se declara limpia es el mismo que se prescribe para el leproso en Levítico 14:4 . Otras regulaciones se encuentran en Negâim , caps. 12, 13.