Hay un dicho que todos deben creer: si un hombre aspira al oficio de
superintendente en la Iglesia, es una excelente obra en la que su
corazón está puesto. Un capataz debe ser un hombre contra quien no
se pueda criticar; debe haber estado casado una sola vez; debe ser
sobrio, prudente, de buen compo... [ Seguir leyendo ]
,12,13 De la misma manera, los diáconos deben ser hombres de
dignidad, hombres rectos, hombres que no sean dados a excesos en el
vino, hombres que no estén dispuestos a rebajarse a formas
vergonzosas de ganar dinero; deben guardar el secreto de la fe que les
ha sido revelado con una conciencia limpi... [ Seguir leyendo ]
Os escribo estas cosas con la esperanza, mientras os escribo, de
llegar pronto a vosotros. Pero os escribo para que, si tardo, sepáis
cómo comportaros en la casa de Dios, que es la asamblea del Dios
vivo, y columna y baluarte de la verdad.
Aquí en una frase está la razón por la que se escribieron l... [ Seguir leyendo ]