Comentario Biblico de Juan Calvino
Números 26:28
28. Los hijos de José después de sus familias. La comparación de las dos tribus, que surgieron de la misma cabeza, es digna de mención. Por el hecho de que Manasés era el padre de un solo hijo, (194) la profecía de Jacob, cuando declaró que el primogénito debería ser inferior a su el hermano menor, Efraín, ya comenzó a recibir su logro. Sin embargo, la bendición de Dios se extendió ampliamente por el aumento de su familia, de modo que excedieron en número a la tribu de Rubén. Pero además, aunque el mayor número de hijos (πολυτεκνία) en el que los descendientes de Efraín eran superiores, era un tipo de fecundidad prometida, aún la excelencia y dignidad, que Jacob profetizó, era diferido a un período lejano; ya que a este respecto la tribu de Efraín era inferior en aproximadamente un tercio, mientras que se le había prometido una cuestión más numerosa. Aunque, por lo tanto, Dios no había hablado en vano, sin embargo, el cumplimiento de Su promesa no apareció de inmediato.
En la tribu de Dan, sin embargo, se presentó el increíble poder de Dios. Era despreciable entre sus hermanos; y de allí fue una bendición extraordinaria que se le otorgó en forma de un grado y nombre honorables, cuando Jacob declara que "Dan juzgará a su pueblo". (Génesis 49:16.) Se dice que engendró un solo hijo; sin embargo, su posteridad supera los 64,000.