1 Corintios 14:6-11

Hay que saber discernir para aprender

Si la gente en la asamblea no podía aprender de lo que se decía, ¿de qué servía el sonido? Incluso en el sonido musical, debe haber un sonido distinto para que tenga sentido. Hay ciertas reglas de ritmo y armonía que deben seguirse. Un niño que simplemente juega con un instrumento rara vez hace un disco de éxito.

McGarvey dice: "Además, algunos instrumentos, como la trompeta, debido a las leyes fijas y establecidas del tono, se utilizan para transmitir un lenguaje tan bien definido e inconfundible como el de la voz. Así, ciertas notas en la trompeta ordenan un carga, otros la unión de la batalla, y aún otros la retirada, etc. Ahora, si la trompeta o el trompetista no produce este tono/lenguaje inteligiblemente, el ejército se echa en confusión” ( 1 Corintios 14:6-8 ).

De la misma manera, el hablar en lenguas que no fue entendido por el oyente fue un esfuerzo inútil. En el mejor de los casos, era como hablar con uno mismo. En el peor de los casos, podría crear confusión. Los idiomas son útiles sólo cuando tienen sentido. No son para mera exhibición. Tanto el hablante, que usaba un idioma, como el oyente, que no podía entender el idioma usado, eran como extranjeros ignorantes entre sí ( 1 Corintios 14:9-11 ).