Hechos 4:1-4

Pedro y Juan arrestados

Mientras todavía estaban predicando, hombres armados entraron en el área del templo y arrestaron a Pedro y Juan. Este grupo incluía sacerdotes, el capitán del templo y los saduceos. En una nota a pie de página, FF Bruce dijo que el capitán del templo "pertenecía a una de las familias de los principales sacerdotes, y en el templo ocupaba el puesto siguiente al sumo sacerdote. La guardia del templo que él comandaba era un grupo selecto de levitas". Presuntamente , de este cuerpo se enviaron centinelas para custodiar la tumba de Jesús, Mateo 27:65 y sigs.)" Coffman describió a los saduceos como

... materialistas seculares y orgullosos que negaban la existencia de un mundo espiritual, sosteniendo que ni los ángeles ni los demonios existían, negando cualquier cosa como la resurrección, y rechazando las escrituras del Antiguo Testamento, excepto por partes de ellas que tenían utilidad política, y también rechazando las tradiciones de los ancianos. A través de la riqueza y el poder político, habían ganado el control del aparato religioso que dirigía el templo, y el cargo de sumo sacerdote se ocupaba regularmente de este grupo.

Lucas nos dice que los apóstoles fueron arrestados porque enseñaban a la gente y predicaban la resurrección al predicar acerca de Jesús.

Uno bien podría maravillarse del hecho de que los fariseos, que tantas veces habían desafiado a Jesús mientras caminaba por la tierra, no fueron mencionados específicamente por Lucas como parte del grupo que tomó prisioneros a Pedro y Juan. Quizás esto se debió a que los apóstoles estaban enseñando la resurrección, en la cual creían los fariseos. De hecho, Hechos a menudo presenta a los fariseos como simpatizantes de la iglesia e incluso obedientes al evangelio (5:34-40; 15:5; 23:6-9; 26:4-5).

Ya era de noche, aparentemente Pedro y Juan habían predicado durante casi tres horas (comparar 3:1), por lo que los mantuvieron en la cárcel hasta el día siguiente. Si este fuera un caso criminal, el Sanedrín no podría juzgarlo de noche (Walter M. Chandler, The Trial of Jesus, p. 137). A pesar de su arresto, Dios hizo que la predicación del evangelio diera fruto, ya que Lucas informa que el número de hombres que creyeron llegó a ser como 5,000 ( Hechos 4:1-4 ). La palabra "creyeron" es una sinécdoque de plena obediencia al evangelio.