Josué 15:1-19
1 La parte que tocó en el sorteo a la tribu de los hijos de Judá, según sus clanes, se extendía hasta el territorio de Edom y hasta el desierto de Zin en el Néguev, su extremo sur.
2 Su frontera sur era desde el extremo del mar Salado, desde la bahía que mira hacia el sur.
3 Seguía en dirección sur hasta la cuesta de Acrabim y pasaba hasta Zin. Subía por el sur hasta Cades-barnea y pasaba por Hezrón. Luego subía hacia Adar, hasta rodear Carca.
4 De allí la frontera pasaba a Asmón y continuaba por el arroyo de Egipto y terminaba en el mar. Esta será su frontera del sur.
5 La frontera oriental era el mar Salado hasta la desembocadura del Jordán. Por el lado norte la frontera era desde la bahía del mar en la desembocadura del Jordán.
6 Luego la frontera subía por Bet-jogla y pasaba por el norte de Bet-haarabá. Luego la frontera subía hacia la piedra de Bohan hijo de Rubén.
7 Luego la frontera subía desde el valle de Acor hasta Debir, y se dirigía al norte, hacia Gilgal, que está frente a la cuesta de Adumim, al lado sur del valle. La frontera pasaba hasta las aguas de En-semes y llegaba hasta En-rogel.
8 Luego la frontera subía por el valle de Ben-hinom a la ladera sur de Jebús (que es Jerusalén). Luego la frontera subía hacia la cumbre del monte que está frente al valle de Hinom, al occidente, en el extremo norte del valle de Refaím.
9 Después doblaba desde la cumbre del monte hacia el manantial Aguas de Neftóaj y llegaba a las ciudades del monte Efrón, rodeando luego a Baala (que es Quiriat-jearim).
10 La frontera torcía después desde Baala hacia el occidente hasta el monte Seír, y pasaba al norte de Jearim (que es Quesalón); descendía a Bet-semes y seguía hacia Timna.
11 Luego la frontera salía hacia el lado norte de Ecrón. La frontera rodeaba Sicrón, pasaba por el monte Baala, llegaba a Jabneel, y el terminal de la frontera daba en el mar.
12 La frontera occidental era la costa del mar Grande. Estas son las fronteras del territorio de los hijos de Judá, según sus clanes.
13 De acuerdo con el mandato del SEÑOR a Josué, este dio a Caleb hijo de Jefone una parte entre los hijos de Judá. Le dio Quiriat-arba, que es Hebrón (Arba fue el padre de Anac).
14 Y Caleb echó de allí a los tres hijos de Anac: a Sesai, a Ajimán y a Talmai, descendientes de Anac.
15 De allí subió contra los habitantes de Debir (Antes el nombre de Debir era Quiriat-séfer).
16 Entonces Caleb dijo: — Al que ataque y tome Quiriat-séfer, yo le daré por mujer a mi hija Acsa.
17 Otoniel hijo de Quenaz, hermano de Caleb, fue quien la tomó. Y Caleb le dio por mujer a su hija Acsa.
18 Y aconteció que cuando ella llegó, lo persuadió a que pidiera a su padre un campo. Entonces ella hizo señas desde encima del asno, y Caleb le preguntó: — ¿Qué quieres?
19 Ella respondió: — Hazme un favor. Ya que me has dado tierra en el Néguev, dame también fuentes de aguas. Entonces él le dio las fuentes de arriba y las fuentes de abajo.
Antes de que la distribución de la tierra fuera demasiado lejos, era apropiado que Caleb viniera a Josué y le recordara la promesa que Dios le había hecho ( Números 14:21-24 ; Deuteronomio 1:35-36 ). Caleb dice que tenía cuarenta años cuando ayudó a espiar la tierra.
La poderosa influencia de los líderes infieles se puede ver en su habilidad para hacer que los corazones de las personas se derritan. En contraste, el hombre que "siguió totalmente al Señor" fue recompensado ( Hebreos 11:6 ; Hebreos 6:10 ).
Sabemos que Israel vagó treinta y ocho años más en el desierto antes de volver a la tierra prometida, por lo que el informe de Caleb de los cuarenta y cinco años que pasaron nos dice que la conquista de Canaán había tomado siete años hasta ese momento ( Deuteronomio 2:14-15 ).
Grandes hombres de Dios, como Caleb, confían en Dios para que les dé la fuerza para completar su tarea (comparar 1 Samuel 17:37 ; 1 Samuel 17:45-47 ; 2 Timoteo 4:16-18 ).
Fíjate, Caleb sabía que había vivido hasta los ochenta y cinco años gracias a la bendición de Dios ( Josué 14:10 ). Aún sabía que solo podía lograr la conquista si el Señor estaba con él ( Josué 14:12 ; Santiago 4:13-15 ; Romanos 8:31 ; 1 Pedro 4:13 ; Hebreos 13:5-6 ).
Caleb les había dicho a los hijos de Israel que podían conquistar la tierra y, con la ayuda de Dios, él y su yerno, Otoniel, lo lograron a pesar de que se enfrentaron al más fuerte de los gigantes que habitaban en Canaán. ( Josué 14:13-15 ; Josué 15:13-19 ).