Romanos 3:19-31

La conducta de la humanidad

19 Los judíos podrían cambiar los pasajes de los Salmos para aplicarlos a las naciones. Pero el apóstol insiste correctamente en que lo que está escrito en la ley obliga a los que están bajo la ley. Habiendo silenciado previamente a los no judíos y ahora efectivamente incluido a los judíos en la misma condición, Pablo llega a la gran conclusión de esta sección de la epístola, que todo el mundo está sujeto al justo veredicto de Dios.

JUSTIFICACIÓN INDIVIDUO

21 La sección anterior no encontró a nadie justo sino a Dios mismo. Nadie ha podido alcanzar el estándar de Dios haciendo el bien o guardando la ley. Entonces, ¿cómo podemos llegar a ser justos ante Dios? Solo haciéndonos partícipes de Su justicia.

22 El canal a través del cual podemos obtener esta justicia es la fe de Jesucristo. Él solo de toda la humanidad, no sólo hizo el bien y guardó la ley, sino que Él creyó en Dios aun cuando Él lo hirió por nuestros pecados. Es por su fe para nuestra fe (Rom_1:17).

24 Lo odiaron sin causa , gratuitamente. Tal es el significado de esta preciosa palabra. La justificación por cualquier otro motivo que no sea el favor gratuito y no forzado de Dios es imposible, porque nadie lo merece. Pero ahora Cristo Jesús ha efectuado una liberación de todo juicio, la cual es absolutamente gratuita para todos los que creen.

25 El punto importante en este pasaje, sin embargo, no es nuestra justificación, sino la de Dios , porque es Su justicia la que recibimos. En Israel Él había hecho provisión para la expiación, o un refugio de los pecados. Esto no era estrictamente justo, porque la pena de estos pecados todavía se debía. La respuesta a esto, así como la respuesta a Su obra presente, se encuentra en la sangre de Cristo. Eso se conforma con los pecados, pasados, presentes y futuros. Eso reivindica la justicia de Dios y hace posible que Él sea el Justificador de todos los que son de la fe de Jesús.

27 Tal liberación, enteramente sobre la base de la gracia, excluye toda jactancia, a menos que sea en Cristo y en Su Dios, Quien se ha hecho nuestro Justificador.

30 Los de la Circuncisión que han creído antes y han recibido un perdón, reciben este mayor favor por la fe que tienen. La Incircuncisión usa la fe como el canal para recibirla.

1 La proclamación del reino vuelve a David, porque se basa en el pacto hecho con él. El evangelio de Dios, dispensando la justificación, nos retrotrae a Abraham, con quien se hizo la alianza para bendecir a todas las familias de la tierra. La gracia mucho mayor de la conciliación se remonta aún más atrás y nos involucra con Adán y su ofensa.

Como este don de la justificación se le dio por primera vez a Abraham y él es su gran ejemplo, el apóstol toma su caso en detalle para mostrar su carácter absolutamente lleno de gracia.

4 Es importante recordar que, mientras que el juicio futuro de Dios se basa en hechos, sus dones presentes se echan a perder absolutamente en el momento en que los relacionamos con cualquier sospecha de mérito u obra. La justificación es tan libre, o más libre, que la luz del sol. En el juicio Él pagará a todos los que tienen derecho a un salario. No estará en deuda con nadie. Pero cuando Él da, Él da , y se niega a permitir que se pague por Sus dones, incluso si alguien pudiera pagar el precio. La justificación es para el que no trabaja, pero cree . Esto distingue al evangelio de toda religión, divina o pagana.

7 El perdón es el ejercicio de la clemencia ejecutiva y está relacionado con el reino. La cobertura del pecado es un acto del sacerdote que hacía expiación con la sangre de los sacrificios, bajo la ley. Pero la justificación es el acto judicial del Juez, y supera con creces tanto al perdón como a la expiación. Sólo los culpables pueden ser perdonados. La expiación solo cubre el pecado de la vista de Dios. La justificación, o vindicación, es una absolución completa de toda culpa, el pronunciamiento del veredicto "no culpable".

8 El hecho de que Abraham fue justificado cuando aún no estaba circuncidado abre la puerta de la justificación a la Incircuncisión. Ellos también pueden reclamarlo como su padre, porque tienen la realidad de la cual la circuncisión no era más que la señal exterior.