Apocalipsis 11:10

10 Y los moradores de la tierra se regocijarán sobre ellos, y se alegrarán, y se enviarán regalos unos a otros; porque estos dos profetas atormentaron a los que moraban en la tierra .

El pueblo que sobreviva a los juicios de los sellos y trompetas y cualquier otro juicio que viniera de estos dos profetas pensará que sobrevivió a la tribulación y harán una gran fiesta y se enviarán regalos unos a otros. Estos dos profetas obviamente fueron un tormento para aquellos que amaban vivir un estilo de vida pecaminoso en la tierra.

Muchas personas contaron desde la gran desaparición (rapto) o el final de la guerra de los capítulos 38 y 39 de Ezequiel. Les harán saber a todos que han pasado siete años y que se espera un Cristo. Probablemente enseñarán que la Bestia bíblica y el Falso Profeta fueron en realidad los dos líderes asesinados. En lugar de Cristo, recibirán un Cristo falso que la Biblia llama la Bestia Anticristo.

Este término anticristo también puede significar alguien que viene en lugar de Cristo en lugar de alguien que se opone a él. En este caso, ambas son verdaderas. El mundo aceptará al Cristo del infierno y su reino de la nueva era.

Con la teología de reemplazo de la supercesión que prevalecerá en la Iglesia mundial, no aceptarán la verdad de un reino judío literal en la tierra que proclamaron los dos profetas. En su lugar, estarán buscando un Cristo que cumpla con todas las creencias religiosas del mundo y que anule los reclamos de estos dos judíos que fueron asesinados.

El Cristo que aceptarán afirmará estar por encima de cualquier cosa llamada Dios. Dirá que el sistema de sacrificio judío ha sido eliminado y que él cumplió con el sacrificio. Luego detendrá el sistema de sacrificios que se había restablecido en el templo de Jerusalén y colocará una imagen de sí mismo en el lugar santo. La imagen se animará y hablará. Al entrar en el lugar santísimo del templo, se mostrará a sí mismo y al mundo que él es Dios.

2 Tesalonicenses 2:4  el cual se opone y se exalta sobre todo lo que se llama Dios, o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios.

El mundo entero lo amará y creerá que este hombre en realidad es Dios y su Cristo salvador. Sólo los elegidos no serán engañados. Los dos profetas que el mundo odió y que hablaron de un reino bajo la ley de Dios y un rey judío ahora están muertos. Los pecadores ahora creerán que este falso salvador anuló la ley que Dios le dio a Israel. Por lo tanto, creerán que ya no hay absolutos morales y que pueden hacer lo que crean que es correcto ante sus propios ojos.

Esto no es nada nuevo; todos los que se oponen a la ley eterna de Dios siempre han creído esta mentira de Satanás. Cristo no vino a abolir la ley. Él vino a cumplir la maldición de la ley y permitirnos guardar el espíritu completo de la ley al nacer de Su Espíritu.