El Gran Comentario de Cornelius à Lapide
2 Juan 1:13
Los hijos de tu hermana Electa te saludan. De ahí que Œcumenius y nuestro Serarius sostienen que el nombre de Electa , a quien se inscribe esta Epístola, es un sustantivo apelativo y el título de alguna iglesia particular. Piensan que el significado es: "Los hijos de tu hermana, es decir , los fieles de la Iglesia elegida de Éfeso, te saludan, oh Iglesia elegida de Corinto". Algunos piensan que estas Electas eran personas particulares, pero que se llamaban hermanas, no por serlo en la carne, sino por ser discípulas del mismo maestro, S. Juan.
Es probable que la hermana de Electa también se llamara Electa por el principio de que en muchas familias dos o más hijos llevan el mismo nombre, de modo que hay dos Juanes, dos Pedros, dos Marías o Margaritas. Agrego lo que he insinuado al comienzo de la Epístola, que Electa no es tan estrictamente un nombre propio como apropiado, un título, por así decirlo, de dignidad y oficio que se otorga a varias personas que desempeñan funciones similares.
Electa así parece haber sido el nombre de una matrona principal, que como madre sostenía a los ministros de la Iglesia, a las viudas, a los huérfanos y a los pobres, y que como diaconisa presidía la instrucción y gobierno de otras mujeres en la Iglesia. El significado entonces es: "Oh Electa, madre de los fieles en la Iglesia, di de Corinto, los hijos de tu hermana, que también es Electa, madre de los fieles, en la Iglesia de Éfeso, desde donde escribo, saludo El e." Es en favor de esto que el artículo griego se antepone a Electa, que no es habitual en el uso de nombres propios, sino a nombres de dignidad y oficio apropiados a ciertas personas.
Es un ejemplo de la bondad y cortesía de S. Juan que saluda a Electa, no sólo en su propio nombre, sino en el de sus nietos.
Algunos códices griegos y latinos añaden: La gracia sea con ellos. Amén. Este es un saludo digno de S. Juan y común a S. Pablo.