1 Tesalonicenses 1:6 . Y habéis llegado a ser seguidores [imitadores] de nosotros. Habían visto en Pablo prueba de que la palabra era la palabra de Dios, y ellos mismos se hicieron imitadores de Pablo, dando así prueba de que la palabra de Dios obraba eficazmente en ellos también. El punto de semejanza entre él y ellos que más llamó la atención de Pablo fue el espíritu gozoso con el que soportaron la aflicción consiguiente a la recepción del Evangelio.

Pero como en todo lo demás, así en esto fue Jesús el capitán de la salvación, el líder en fe y gozosa perseverancia ( Hebreos 12:1-4 ); y por lo tanto, al imitar a Pablo, fue al Señor a quien realmente imitaron y se conformaron.

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