Miqueas 3:4

¿Retiene Dios alguna vez Su bendición de aquellos que claman por ella?

PROBLEMA: Este texto y otros pasajes de la Escritura (cf. Isaías 1:15 ; Santiago 4:3 ) hablan de Dios reteniendo Su bendición de aquellos que claman a Él. Pero, la Biblia sostiene, por otro lado, que Dios “da abundantemente a todos” los que piden ( Santiago 1:5 ), “porque todo el que pide, recibe” ( Lucas 11:10 ).

SOLUCIÓN: Estos diversos textos hablan de diferentes tipos de personas. Dios nunca niega Su bendición prometida a aquellos que llaman con un corazón sincero y arrepentido. Pero, Él se lo niega a aquellos que no invocan “fe sin dudar” ( Santiago 1:6 ) o que “piden mal” para gastarlo en sus propios placeres ( Santiago 4:3 ). En resumen, Dios siempre concede las bendiciones prometidas a los fieles, pero no siempre promete las mismas bendiciones a los infieles.

En segundo lugar, no todas las bendiciones prometidas por Dios son incondicionales, como lo fue Su promesa unilateral de la tierra a Abraham y sus descendientes ( Génesis 12 ; 14–15; Génesis 17 ). Muchas de Sus bendiciones están condicionadas a la obediencia de Su pueblo, como el pacto bilateral con Israel (“Si en verdad escucháis mi voz”, Éxodo 19:5 ).

Asimismo, Dios nunca promete que sanará a todos en esta vida de todas las enfermedades. De hecho, Dios rehusó sanar a Pablo aunque le rogó tres veces que lo aliviara de su carga ( 2 Corintios 12:8-9 ). Dios tampoco promete que hará ricos a todos los creyentes en esta vida. Incluso Jesús se hizo pobre por nosotros ( 2 Corintios 8:9 ), y declaró que siempre habría pobres ( Mateo 26:11 ), aunque fueran espiritualmente bienaventurados ( Mateo 5:3 ). En estos casos, no importa cuánta fe uno tenga, Dios no necesariamente otorgará la bendición en esta vida, ya que Él nunca prometió hacerlo incondicionalmente.