lo adoró ; como el Mesías, el Hijo de Dios y el Salvador de los hombres. Como los discípulos que habían sido instruidos más plenamente por Cristo, lo adoraron mientras ascendía al cielo, y como los habitantes de ese mundo lo adoran, atribuyéndole "bendición, honra, gloria y poder al que está sentado en el trono, y al Cordero por los siglos de los siglos"; todos aquellos a quienes se les da a conocer deben adorarlo también, para que puedan estar capacitados para unirse a los empleos y participar de los gozos del cielo. Apocalipsis 5:7-14 .

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Antiguo Testamento