Éxodo 14:27

El mar volvió a su fuerza. Su fuerza, por así decirlo, había sido frenada y retenida por las riendas del poder divino; pero ahora se le da todo el alcance a su furia impetuosa. La expresión implica que el mar no regresó pausadamente, como en las mareas ordinarias, sino que se precipitó sobre ellas precipitadamente.