Yo muero, pero Dios estará contigo y te traerá de nuevo. Esta seguridad les fue dada, y cuidadosamente preservada entre ellos, para que no amen demasiado a Egipto cuando los favorezca, ni le teman demasiado cuando les desapruebe. Estas palabras de Jacob nos reconfortan en referencia a la muerte de nuestros amigos: pero Dios estará con nosotros , y su presencia bondadosa es suficiente para compensar la pérdida. Nos dejan, pero él nunca nos fallará. Él nos llevará a la tierra de nuestros padres , la Canaán celestial.adonde fueron antes que nosotros nuestros piadosos padres. Si Dios está con nosotros mientras nos quedamos atrás en este mundo, y pronto nos recibirá para estar con los que se fueron antes a un mundo mejor, no debemos “entristecernos como los que no tienen esperanza”.

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