Apocalipsis 2:1 .—Los capítulos segundo y tercero contienen las siete epístolas a las siete iglesias de Asia; que se tratan particularmente porque, como se cree comúnmente, estaban bajo la inspección inmediata de St. John. Constituyó obispos sobre ellos. Residió mucho en Éfeso, que por lo tanto es nombrado el primero de los siete. Los temas principales de este libro también se componen desiete; siete iglesias, siete sellos, siete trompetas y siete copas; comosietetambién fue un número místico en todo el Antiguo Testamento.

Asimismo, hay en estas epístolas varios caracteres innatos, que son peculiares de la iglesia de esa época, y no pueden aplicarse tan plenamente a la iglesia de ninguna otra época: tienen, por lo tanto, un significado más literal que místico; pero, a pesar de esto, contienen los más excelentes preceptos espirituales y morales y exhortaciones, elogios y reprensiones, promesas y amenazas, que pueden ser de infinita utilidad para la iglesia en todas las edades.

La forma y el orden de las partes es casi el mismo en todas las epístolas: primero, una orden de escribir; luego algún carácter y atributos del hablante, tomados de la visión del primer capítulo, y apropiados al tema de cada epístola; luego elogios o reproches, con promesas o amenazas adecuadas; y luego, en todos, la misma conclusión: El que tiene oído, oiga, etc.

La primera epístola está dirigida a la iglesia de Éfeso, ya que era la metrópoli del Asia libia, el lugar de la residencia principal de San Juan y una de las ciudades más célebres de Asia: pero aunque alguna vez fue tan magnífica y gloriosa, es ahora se ha convertido en un pueblo mezquino, en el que apenas vive una sola familia de cristianos. ¡Con tanta fuerza se ha cumplido la denuncia en Apocalipsis 2:5 ! Ver Hechos 19:1 .

Al ángel de Éfeso , es decir, al obispo o al oficial presidente de la iglesia. Había un oficial de la sinagoga, que tenía el nombre de ángel; y, desde su oficio de pasar por alto al lector de la ley, se le llamó episcopus, o bis

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