Os ha puesto superintendentes, etc.— 'Επισκοπους, inspectores u obispos. La expresión sobre la que ha hecho el Espíritu Santo, etc. aplicado a hombres que habían sido apartados regularmente para el oficio ministerial, muestra cuán absurdo es que alguien rechace el ministerio en general, con el pretexto de que tiene el Espíritu Santo para enseñarle. Este pasaje debe admitirse como una prueba incontestable de que la sangre de Cristo aquí se llama la sangre de Dios, por ser la sangre de ese Hombre, que es Dios con nosotros, Dios manifestado en carne; y quien es sobre todo, Dios bendito por los siglos.

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