No des lo santo, etc.— no sea que estos pisoteen, —y aquellos se vuelvan y te desgarren. Hay una máxima similar a esta en los escritos talmúdicos: "No arrojes perlas a los cerdos"; a lo que se añade, a modo de explicación, "No ofrezcas sabiduría a quien no conoce el precio de ella". Ésta fue una de las razones por las que nuestro Salvador enseñó en parábolas. Compárese con Hechos 13:45 .

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad