Comentario de Coke sobre la Santa Biblia
Números 25:11-13
Finees, hijo de Eleazar, etc.— Dios, en recompensa del celo inconmovible de Finees, le confirmó el derecho que tenía de suceder a Eleazar, como hijo suyo, en el oficio del sacerdocio; y le prometió que el mismo augusto privilegio se perpetuaría en su familia. Parece, por las palabras del versículo 12, como si el sacerdocio fuera algo diferente del pacto de paz. Algunos de los intérpretes judíos concluyen de este texto que Dios le había prometido a Finees el privilegio de procurar el perdón a partir de entonces para los culpables. Pero no hay nada más indefinido en el lenguaje sagrado que la palabra paz:se utiliza para denotar todo tipo de prosperidad y, en particular, la de larga vida. Finees realmente lo disfrutó en este último sentido, como aparece en el Libro de los Jueces. Asimismo, se cumplió la promesa de un sacerdocio eterno, según el lenguaje del Antiguo Testamento. Los judíos cuentan doce sumos sacerdotes de la raza de Finees desde su tiempo hasta Salomón; nueve más de este período al cautiverio; y quince desde el restablecimiento hasta la época de Antiochus Eupator; el último de los cuales fue Onías, asesinado por Lisias.
Es cierto, el sumo sacerdocio estuvo durante un tiempo en la familia de Ithamar, pero pronto volvió a la de Finees. Eli fue el primero de la familia de Ithamar que disfrutó del cargo; el cual regresó a la casa de Finees en la persona de Sadock, donde continuó hasta los Macabeos. El Dr. Shuckford propone otra explicación de este pasaje, que algunos, quizás, pueden considerar más satisfactoria; al suponer que el sacerdocio se llama aquí eterno, no como una expresión de un plan de continuidad perpetua a los descendientes de Finees, sino como un límite a la familia de Aarón a lo largo de sus generaciones. En consecuencia, podría traducirse así: Será para él, y para su descendencia después de él, un convenio o concesión del sacerdocio eterno;dando a entender que Dios le había dado a Finees, ya su descendencia después de él, una concesión del sacerdocio, que se limitaba a Aarón y sus descendientes, para todas las generaciones; y por eso se le llama el sacerdocio eterno. Éxodo 40:15 cuya promesa no fue en vano; porque Finees podría haber muerto antes que Eleazar, y por eso nunca haber disfrutado del sacerdocio de Aarón.
Porque la expresión es expiación por los hijos de Israel, véase la nota en el cap. Números 8:19 sobre la cual la expiación dice el Dr. Beaumont: "Así se cumple el proverbio, Proverbios 16:14 ".
REFLEXIONES.— Nunca la maldad fue más atrevida que en Zimri, ni el celo más ardiente que en Finees. Mientras Moisés y el pueblo, con lágrimas de arrepentimiento, lamentaban su pecado y desaprobaban los juicios que habían provocado, con descaro descarado, como si se glorificara de su vergüenza, este príncipe de Simeón conduce abiertamente a una ramera de calidad a su tienda. Nota;La desvergüenza en el pecado suele ser consecuencia de la lascivia. Finees, enardecido de celos por la gloria de Dios e indignado por el horrendo crimen, se apresura a seguir a esta desvergonzada pareja, los sorprende en su crimen y, lanzando su jabalina a través de ambos, ejecuta contra ellos, como magistrado de Dios, condenar la venganza. Aunque algunos pecadores son demasiado grandes para las leyes humanas, hágales saber que hay una espada de Dios que los alcanzará. Dios expresa su aprobación del hecho, eliminando la plaga que había comenzado, y arregla las consecuencias del el sacerdocio sobre los hijos de Finees; porque con su celo de sacerdote y su fidelidad como magistrado, había apartado la ira de la congregación.
Nota; (1.) La distribución imparcial de la justicia sobre los infractores es uno de los principales medios para librar a la tierra del pecado y salvarla de las plagas de Dios. (2.) En la causa de Dios, no debemos temer reprender a los pecadores más grandes o atrevidos. (3.) Dios recompensará a los que son celosos en su causa con bendiciones especiales.