Josué 2:9-11

(9-11) Ella dijo a los hombres: Sé que el Señor les ha dado la tierra ... - Las palabras de esta confesión son memorables en todos los sentidos. Note el cumplimiento del cántico profético de Moisés, que se repite en parte aquí ( Éxodo 15:15 , con Josué 2:9 ), “Todos los habitantes de Canaán se desvanecerán; temor y pavor caerán sobre ellos.

Pero observe especialmente la expresión de la propia creencia de Rahab: “ Jehová, tu Dios, él es el Dios arriba en los cielos y abajo en la tierra”. ¿Fue la fe de los hombres de Israel mucho más lejos que esto? ¿Siempre fue tan lejos? (Comp. Josué 24:14 ; 1 Reyes 18:21 ; Jonás 1:9 ).

Los propios profetas no pudieron afirmar mucho más. El mayor de ellos estaba satisfecho si podía hacer que el pueblo de Israel reconociera esto. La confesión de Rahab también forma parte de una serie. Los egipcios, filisteos, sirios, asirios, babilonios, persas, todos a su vez fueron llevados al mismo reconocimiento por su contacto con Israel. La razón se declara en Josué 4:24 : “Para que todos los habitantes de la tierra conozcan la mano de Jehová, que es poderosa”.