Verso 33. No os engañéis... No os impongáis a vosotros mismos, ni permitáis que otros lo hagan.
Las malas comunicaciones corrompen las buenas costumbres... Hay muchos dichos como éste entre los poetas griegos; pero éste del apóstol, y que según los mejores MSS. hace un verso yámbico, se supone generalmente que fue tomado de la perdida comedia de Thais de Menandro.

Φθειρουσιν ηθη χρησθ' ὁμιλιαι κακαι-

Las malas compañías corrompen las buenas costumbres.

Hay un proverbio muy parecido entre los rabinos:

תרי אורי יכישי ותר רטיכא אוקרן יכישי לרטיכא

"Había dos troncos secos de madera, y un tronco verde; pero el tronco seco quemó al verde".

No hay dificultad en este dicho; quien frecuenta la compañía de hombres malos o corruptos, pronto será como ellos. Puede ser sano en la fe, y tener la vida y el poder de la piedad, y al principio frecuentar su compañía sólo por su conversación agradable, o sus logros literarios: y puede pensar que su fe es a prueba de su infidelidad; pero pronto encontrará, por medio de sus discursos sombríos, que su fe se debilita; y cuando una vez que se pone bajo el imperio de la duda, la incredulidad pronto prevalecerá; su mala compañía corromperá su moral; y los dos troncos secos pronto quemarán al verde.

El mismo sentimiento con casi las mismas palabras se encuentra en varios de los escritores griegos; Esquilo, Sept. Theb. ver. 605: Εν παντι πραγει δ' εσθ' ὁμιλιας κακης κακιον ουδεν- "En todo asunto no hay nada más deletéreo que la mala comunicación" ---Diodoro Sículo, lib. xvi. cap. 54: Ταις πονηραις ὁμιλιαις διεφθειρε τα ηθη των ανθρωπων- "Con estas malas comunicaciones corrompió la moral de los hombres".

Ταυτα μεν οὑτως ισθι- κακοισι δε μη προσομιλο

Ανδρασιν, αλλ' αιει των αγαθων εχεο-

Και μετα τοισιν πινε και εσθιε, και μετα τοισιν

Ἱζε, και ἁνδανε τοις, ὡν μεγαλη δυναμις.

Εσθλων μεν γαρ απ' εσθλα μαθησεαι- ην δε κακοισι

Συμμιχθῃς, απολεις και τον εοντα νον.

Theogn. Sent., ver. 31-36.


Sabe esto: No debes estar en compañía de los malvados, sino conversar siempre con los hombres buenos. Con los tales come, bebe y asóciate. Agrada a los que tienen la mayor virtud. De los hombres buenos puedes aprender cosas buenas; pero si te juntas con los malvados, perderás incluso la inteligencia que ahora posees.
 

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