Comentario Biblico de Adam Clarke
Hechos 25:1
CAPÍTULO XXV.
Al ser nombrado Porcio Festo gobernador de Judea, en lugar de
Félix, los judíos le suplican que haga subir a Pablo a
Jerusalén, para que sea juzgado allí; ellos están al acecho
para matarlo en el camino, 1-3.
Festo se niega, y desea que los que puedan probar algo
contra él, vayan con él a Cesarea, 4, 5.
Festo, habiendo permanecido en Jerusalén unos diez días, regresa a
Cesárea, y al día siguiente Pablo es llevado a su juicio, y
los judíos de Jerusalén presentan muchos cargos infundados contra
contra él, contra los que Pablo se defiende, 6-8.
Para complacer a los judíos, Festo le pregunta a Pablo si está dispuesto a
a subir a Jerusalén y ser juzgado allí, 9.
Pablo se niega, y apela al César, y Festo admite la
apelación, 10-13.
El rey Agripa y su esposa Berenice vienen a Cesarea a visitar a
Festus, y son informados por él de las acusaciones contra
Pablo, su último juicio y su apelación a César, 14-21.
Agripa desea escuchar a Pablo; y se cita una audiencia para
día siguiente, 22.
Agripa, Berenice, los principales funcionarios y los jefes de la
reunidos, Pablo es presentado, 23.
Festo abre el asunto con la exposición general de las acusaciones
contra Pablo, su juicio sobre estas acusaciones, el carácter
infundados y frívolos de los cargos, su propia convicción de su
inocencia, y su deseo de que el asunto fuera escuchado por el
mismo rey, para tener algo concreto que escribir al emperador,
a quien iba a enviar a Pablo, de acuerdo con su apelación, 24-27
NOTAS SOBRE EL CAP. XXV.
verso Hechos 25:1 _ Ahora bien, cuando Festo entró en la provincia... Por la provincia se entiende Judea; porque, después de la muerte de Herodes Agripa, Claudio pensó que era imprudente confiar el gobierno en manos de su hijo Agripa, que entonces sólo tenía diecisiete años de edad; por lo tanto, Cuspio Fadus fue enviado como procurador. Y cuando más tarde Claudio dio a Agripa el tetrarcado de Filipo, el de Batanea y Abila, mantuvo sin embargo la provincia de Judea más inmediatamente en sus manos, y la gobernó por medio de procuradores enviados desde Roma. José. Ant. lib. xx. cap. 7, sec. 1. Destituido Félix, se envía a Porcio Festo en su lugar; y habiendo llegado a Cesarea, donde el gobernador romano tenía generalmente su residencia, después de haber permanecido tres días, subió a Jerusalén, para familiarizarse con la naturaleza y la complexión del gobierno eclesiástico de los judíos; sin duda, con el propósito de la mejor administración de la justicia entre ellos.