Verso Hechos 4:14. No podían decir nada en contra... No podían contradecir la doctrina apostólica, porque eso estaba respaldado por el hecho milagroso que tenían ante ellos. Si la doctrina es falsa, el hombre no puede haber sido sanado milagrosamente: si el hombre fue sanado milagrosamente, entonces la doctrina debe ser cierta de que es por el nombre de Jesús de Nazaret que ha sido sanado. Pero el hombre está indiscutiblemente curado; por tanto, la doctrina es verdadera.

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