Comentario Biblico de Adam Clarke
Jeremias 20:1
CAPÍTULO XX
Jeremías, a causa de profetizar su mal sobre Judá
y Jerusalén, es azotado y encarcelado por Pasur, principal
jefe del templo, 1, 2.
Al día siguiente es liberado el profeta, quien denuncia los
terribles juicios de Dios que debían caer sobre el gobernador y
toda su casa, así como sobre toda la tierra de Judá, en el próximo
cautiverio babilónico, 3-6.
Jeremías se queja amargamente de los reproches que le
lanzan continuamente sus enemigos y, apresurándose,
resuelve no hablar más en nombre de Jehová; pero
la palabra del Señor está en su corazón como una llama ardiente,
de modo que no es capaz de abstenerse, 7-10.
El profeta profesa su confianza en Dios, a quien alaba por su
liberación, 11-13.
Los versículos restantes, que parecen estar fuera de lugar,
contienen el pesar de Jeremías por haber nacido para una
vida de tantas penas y angustias, 14-18.
Esta queja se asemeja a la de Job, sólo que es más suave y
más dolorosa. Ésta suscita nuestra compasión, aquélla nuestro horror.
Ambas son poéticas y adornadas con todas las circunstancias
que puedan realzar el colorido. Pero tales circunstancias no
siempre deben ser entendidas o explicadas literalmente.
Debemos a menudo hacen concesiones a las figuras
fuertes de la poesía oriental.
NOTAS SOBRE EL CAP. XX
Versículo Jeremias 20:1 . Pashur - gobernador en jefe. Pashur fue probablemente uno de los principales sacerdotes de las veinticuatro clases.