Verso 40. Permaneció allí dos días... No se nos dice que hiciera milagros entre ellos; esto no parece haber sido necesario: era un pueblo de corazón sencillo y enseñable, y le creían por la evidencia de su propia verdad eterna. ¿Por qué no se hacen milagros ahora? Los milagros eran sólo para el establecimiento de las doctrinas del cristianismo, donde fueron predicadas por primera vez; nosotros profesamos creer en estas doctrinas; por lo tanto, para nosotros, los milagros serían inútiles. Donde la doctrina se acredita, no es necesario ningún milagro: los samaritanos creyeron, y no se hizo ningún milagro entre ellos; por la sencilla razón de que no era necesario.

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