Comentario Biblico de Adam Clarke
Levítico 11:22
Verso Levítico 11:22. La langosta. ארבה arbeh, ya sea de ארב arab, acechar o emboscar, porque a menudo inmensos vuelos de ellas se posan repentinamente en los campos, viñedos, etc., y destruyen todos los productos de la tierra o de רבה rabah, se multiplicó, por sus prodigiosos enjambres. Véase un relato particular de estos insectos en las notas, Vea " Éxodo 10:4 " .
La langosta calva. סלעם solam, compuesto, dice el señor Parkhurst, de סלע sala, cortar, romper, y עם am, contigüidad; una especie de langosta, probablemente llamada así por su forma escarpada y brillante. Véase la primera de las láminas de Scheuchzer, vol. iii, p. 100.
El escarabajo. חרגל chargol. "El nombre hebreo parece un derivado de חרג charag, sacudir, y רגל regel, el pie; y así denotar la agilidad de sus movimientos. Así, en inglés llamamos grasshopper a un animal del tipo de la langosta, cuyo nombre en francés es souterelle, del verbo sauter, saltar" - Parkhurst. Esta palabra sólo aparece en este lugar. El escarabajo nunca puede ser pensado aquí, ya que ese insecto nunca fue comido por el hombre, quizás, en ningún país del universo.
El saltamontes. חגב chagab. Bochart supone que esta especie de langosta tiene su nombre del verbo árabe [árabe] hajaba, velar; porque cuando vuelan, como lo hacen a menudo, en grandes enjambres, eclipsan incluso la luz del sol. Véanse las notas sobre Ver las notas sobre " Éxodo 10:4 " , y la descripción de diez clases de langostas en Bochart, vol. iii, col. 441. 441. Y véanse las figuras en Scheuchzer, en cuyas láminas se representan 20 especies diferentes, vol. iii., p. 100. Y véase el Dr. Shaw sobre los animales mencionados en este capítulo. Travels, p. 419, c., 4to. edición y cuando se consulten todos ellos, el lector verá cuán poca dependencia se puede tener de las conjeturas más eruditas relativas a estos y a los demás animales mencionados en la Escritura. Sin embargo, una cosa es totalmente evidente, a saber, que la langosta se comía, no sólo en aquellos tiempos antiguos, en la época de Juan Bautista, Mateo 3:4, sino también en la actualidad. El Dr. Shaw las comió en Berbería "fritas y saladas", y nos dice que "tenían un sabor muy parecido al del cangrejo de río". Se han comido en África, Grecia, Siria, Persia y en toda Asia, y parece que tribus enteras vivían de ellas, por lo que los griegos las llamaban acridófagos o comedores de langostas. Véase Estrabón, lib. xvi, y Plinio, Hist. Nat., lib. xvii., c. 30.