Comentario Biblico de Adam Clarke
Oseas 2:1
CAPITULO II
El profeta exhorta a su pueblo a que hable y actúe como lo hicieron
que obtuvieron la misericordia de Dios; y a protestar enérgicamente
contra la conducta de su madre, (Samaria), cuyo cautiverio vino
por haber abandonado a Dios y atribuir su prosperidad a los ídolos, 1-5.
Como ampliación de esta amenaza, el profeta
enumera una serie de aflicciones que debían sobrevenirle
de su deber para con Dios, y de su insensatez al seguir
ídolos y atribuirles falsamente las bendiciones de la Providencia, 6-13.
Después de estas correcciones, sin embargo, Dios promete conducir a Israel
Israel sano y salvo a su propia tierra; aludiendo tal vez a su
cautividad en Babilonia, pues se supone que esta profecía
fue pronunciada unos doscientos cincuenta años
años antes de este acontecimiento, 14, 15.
Además, se compromete a tratarlos como un esposo tierno,
y no como un amo severo, como lo eran los ídolos a los que servían,
16, 17.
El resto del capítulo promete al pueblo de Dios, el verdadero
Israel, la seguridad contra todo mal, con la posesión de toda
bendición, bajo un nuevo pacto; y eso en términos llenos de
belleza, energía y consuelo. El cielo y la tierra, y todo lo que
que contienen; toda la naturaleza, y el Dios de la naturaleza,
se unen para hacer feliz al pueblo de Dios.
Ahora, una parte de la naturaleza, animada o inanimada,
transmite a otra, y todas se unen en dulce armonia
para transmitirlo al oído del Todopoderoso. "Yo oiré, dice
Jehová, yo oiré a los cielos, y ellos oirán a la
tierra, y la tierra oirá el trigo, el vino y el aceite;
y oirán a Jezreel".
NOTAS SOBRE EL CAP. II
Versículo Oseas 2:1 . Decid a vuestros hermanos, Ammi. Prefiero la interpretación de estos nombres propios. Decid a vuestros hermanos , PUEBLO MÍO; y a vuestras hermanas, que habéis ALCANZADO MISERICORDIA.