Versículo Salmo 102:15 . Así las naciones temerán el nombre del Señor. Es cierto que después del edicto de Ciro para restaurar y reconstruir Jerusalén, que fue unos cuatrocientos noventa años antes de Cristo, el nombre del verdadero Dios fue más conocido entre los paganos; y la traducción de los Escritos Sagrados al griego, por orden de Ptolomeo Filadelfo, rey de Egipto, unos doscientos ochenta y cinco años antes de la era cristiana, difundió una medida de la luz de Dios en el mundo gentil que no habían visto antes. Añádase a esto la dispersión de los judíos en diferentes partes del imperio romano, después de que Judea se convirtiera en una provincia romana, que tuvo lugar unos sesenta años antes del advenimiento de nuestro Señor; y podemos considerar estos como otros tantos pasos preparatorios para la conversión de los paganos por el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. Y a esta última iluminación general del mundo gentil debe aludir aquí el salmista, cuando habla de "los paganos temiendo el nombre de Dios, y todos los reyes de la tierra su gloria".

 

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