Oseas 7:8-10

UN PUEBLO EN DEFINICIÓN: 2. POLÍTICAMENTE

Oseas 7:8

Decadencia MORAL significa decadencia política. Pecados como estos son la gangrena de las naciones. Es parte de la grandeza de Oseas haber rastreado esto, una prueba de esa versatilidad que lo distingue de otros profetas. El más espiritual de todos, es al mismo tiempo el más político. Le debemos un análisis del arrepentimiento al que el Nuevo Testamento tiene poco que agregar; pero también nos ha dejado una crítica de la sociedad y de la política en Israel, incomparable excepto por Isaías.

Le debemos una concepción intelectual de Dios, que por primera vez en Israel hizo estallar la idolatría; sin embargo, también es el primero en definir la posición de Israel en la política de Asia occidental. Con el solo coraje de la conciencia, Amós había dicho a la gente: Ustedes son malos, por lo tanto deben perecer. Pero la de Oseas es la intuición para seguir los procesos mediante los cuales el pecado produce la muerte, para rastrear, por ejemplo, los efectos de la impureza sobre los poderes de reproducción de una nación, así como sobre su vigor intelectual.

Tan íntimas son estas dos facultades de Oseas que en el capítulo dedicado principalmente a los pecados de Israel ya lo hemos visto exponer los desastres políticos que siguen. Pero desde el punto al que hemos llegado, Oseas 7:8 , la proporción de sus profecías se invierte: nos da menos del pecado y más de la decadencia social y la locura política de su época.