Éxodo 27:1-21

CAPÍTULO 27 El tabernáculo concluido

1. El altar de bronce ( Éxodo 27:1 )

2. El atrio del tabernáculo ( Éxodo 27:9 )

3. El aceite para la lámpara ( Éxodo 27:20 )

El altar de bronce estaba a la puerta del tabernáculo. Posteriormente encontramos en este libro el mencionado altar de incienso de oro. Estaba entre el candelabro de oro y el altar de bronce. Este altar también era de madera de acacia. En lugar de oro, aquí había bronce, porque el altar es el tipo de la cruz donde Cristo se encontró con el calor ardiente de la justicia divina. Sobre este altar se traía el holocausto y se consumía por completo, hablando de Aquel que no conoció pecado y fue hecho pecado por nosotros.

El altar estaba hueco, los fuegos de los sacrificios ardían principalmente en su interior. Esto habla de su obra en la cruz y de los sufrimientos "internos", cuando fue abandonado por Dios; son para nosotros insondables. Los cuernos en las cuatro esquinas del altar indicaban que Su gran obra en la cruz debía ser proclamada mundialmente.

El atrio del tabernáculo tenía por muro lino fino torcido. Esto era un símbolo de la justicia de Dios. Esto excluye al pecador de Su presencia. Pero había una puerta ( Éxodo 27:16 ) en la que reaparecían los colores. Allí se veía azul, púrpura y escarlata. La puerta tipifica a Cristo. Si un israelita entraba por esa puerta en el muro de lino, que lo dejaba fuera, después de entrar, encontraba que el mismo lino fino torcido lo encerraba.

Aun así, si entramos por una puerta, Cristo, la justicia de Dios que nos condenó, nos cubre. También había ganchos y filetes de plata y basas de bronce, contando una vez más la historia de la expiación y la justicia divina ejecutada en el juicio.