Comentario Bíblico de John Gill
Ezequiel 26:5
será un lugar para la propagación de redes en medio del mar ,. Donde solo los pescadores se verían lavando sus redes, y luego extendiéndolos en esta roca, donde se puso a los viajeros los neumáticos, y esto ha sido confirmado por los viajeros, que han visto a los pescadores que se extienden y secan sus redes, y que no tengan otras habitaciones en ella. Pero las chozas de estos hombres. Huetius C se relaciona, que recordó a un parvillario de Hadrian, un jesuita, un hombre sincero y erudito, particularmente en el idioma árabe, que vivió diez años en Siria; y haber escuchado decirlo, que cuando vio las ruinas de los neumáticos, sus rocas al mar, y las piedras dispersas en la orilla, y se pusieron limpias por el sol, las olas y el viento, y solo se usaron para secar redes de pescadores, Puso en mente este paso del profeta; Como lo hizo al señor. Maundrell D cuando está en el lugar, hace unos años; quien dice,.
"No ves nada aquí, sino una mera babel de paredes rotas, pilares, bóvedas, c. No habrá tanto como una casa entera dejó de que sus actuales habitantes son solo unos pocos maliciosos, se alzan en las bóvedas, y subsistían principalmente al pescar; que parecen ser preservados en este lugar por la Divina Providencia, como un argumento visible, cómo Dios ha cumplido su palabra con respecto al neumático, a saber. "Que debería ser como la cima de una roca", c. '':
así que dr. Shaw E dice que este puerto, pequeño como en la actualidad, se ha ahogado hasta ese grado con arena y basura, que los barcos de estos pobres pescadores, quienes ahora y luego visitan este emporio de renombre y "secan sus redes sobre sus rocas y Ruinas ", se puede admitir solo con gran dificultad:
porque lo he hablado, dice el Señor Dios y, por lo tanto, ciertamente debería pasar, como lo ha hecho:
y se convertirá en un botín a las naciones ; El ejército de muchas naciones, que lo sitió durante trece años bajo Nabucodonosor.
c evangel. Demostrar. apuntalar. 6. pag. 328. D Journey de Alepo a Jerusalén, P. 48, 49. Ed. 7. e viaja, p. 273. Ed. 2.