(10) Pero ahora Cristo ha resucitado de entre los muertos, (11) [y] se convierte en (f) primicias de los que durmieron.

(10) Una conclusión del primer argumento: por tanto, Cristo ha resucitado.

(11) Pone la última conclusión para la primera proposición del argumento que sigue. Cristo ha resucitado: por tanto, los fieles (porque de ellos habla) resucitaremos. Luego sigue la primera razón de esta conclusión: porque Cristo se nos presenta para ser considerado, no como un hombre privado aparte y por sí mismo, sino como las primicias; y toma lo que todos los hombres conocen, es decir, que todo el montón se santifica en las primicias.

(f) Alude a las primicias del grano, cuya ofrenda santificaba el resto de los frutos.

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