Porque mi espada será bañada en el cielo; he aquí que descenderá sobre Edom y sobre el pueblo de mi maldición, para juicio.

(d) En mi secreto consejo y en los cielos he decidido destruirlos hasta que mi espada se canse de derramar sangre.

(e) Tenían una opinión de la santidad, porque venían del patriarca Isaac, pero en efecto fueron maldecidos por Dios, y enemigos de su Iglesia como lo son los papistas.

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