¿A quién hablaré y advertiré para que me escuchen? he aquí, su oído es incircunciso, y no pueden escuchar; he aquí, la palabra de Jehová es para ellos oprobio; no se deleitan en ello.

(k) Se deleitan en oír cosas vanas y en cerrar sus oídos a la verdadera doctrina.

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