Aunque tú, Israel, te prostituyas, [aún] (r) no sea que Judá ofenda; y no vengáis a Gilgal, ni subáis a Bethaven, ni jures: El SEÑOR vive.

(r) Dios se queja de que Judá está infectado y quiere que aprendan a regresar a tiempo.

(s) Porque aunque el Señor había honrado este lugar con su presencia, sin embargo, debido a que la idolatría de ellos abusó de él, no quería que su pueblo acudiera allí.

(t) Él llama a Betel, es decir, la casa de Dios, Bethaven, es decir, la casa de iniquidad, debido a sus abominaciones establecidas allí, lo que significa que ningún lugar es santo, donde Dios no es puramente adorado.

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