No seáis como el caballo, [o] como el mulo, [que] no tienen entendimiento: cuya boca (i) debe estar cerrada con freno y freno, para que no se acerquen a ti.

(i) Si los hombres pueden gobernar bestias brutas, ¿piensan ellos que Dios no refrenará y dominará su ira?

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad