Amós 9:1-7

"Vi al Señor de pie sobre el altar, y dijo: Golpea el dintel de la puerta para que se estremezcan los postes; y córtalos en la cabeza a todos; y al último de ellos mataré a espada. El que de ellos huyere, no huirá, y el que escape de ellos no será librado. (2) Aunque cavasen hasta el infierno, de allí los tomará mi mano; aunque suban al cielo, de allí los haré descender. : (3) Y aunque se escondan en la cumbre del Carmelo, los buscaré y los sacaré de allí; y aunque estén escondidos de mi vista en el fondo del mar, de allí mandaré a la serpiente, y morderá. (4) Y aunque vayan al cautiverio delante de sus enemigos, desde allí mandaré la espada, y los matará; y pondré mis ojos sobre ellos para mal, y no para bien.

(5) Y el Señor DIOS de los ejércitos, el que toca la tierra, y se derretirá, y todos los que en ella habitan llorarán; y se levantará como un diluvio; y se ahogará como en el diluvio de Egipto. (6) El que edifica sus historias en los cielos, y funda su tropa en la tierra; el que llama a las aguas del mar y las derrama sobre la faz de la tierra: Jehová es su nombre.

(7) ¿No me sois vosotros como hijos de etíopes, hijos de Israel? dice el SEÑOR. ¿No saqué yo a Israel de la tierra de Egipto? y los filisteos de Caftor, y los sirios de Kir? "

Amos está aquí describiendo lo que vio en una visión. Así habló el Señor a los profetas. Toda la profecía de Isaías se llama la visión de Isaías. Isaías 1:1 . Observe el comienzo de esta escritura memorable: el Señor está de pie sobre el altar para mostrar su autoridad. Y observe además, es el altar, no entre los querubines en el propiciatorio, porque ahora el Señor ha venido a juzgar, no a perdonar.

Golpea el dintel de la puerta, dijo el Señor; como si quisiera decir, que sea derribado. Y mientras que los que huyen parecen escapar, es aparentemente así, porque el Señor los perseguirá y los alcanzará, ya sea que se refugien en el cielo o en el infierno; ya sea en el monte Carmelo o en el fondo del mar. ¡Lector! ¿Quién puede proteger del poder de un vengador del mal tan Todopoderoso? ¿Quién permanecerá cuando él aparezca?

Ver Nahúm 1:6 . La protesta del Señor es sorprendente. ¿No sois vosotros, Israel, como los hijos de los etíopes? es decir, qué pretensiones tienes a mi favor más que ellas. ¡Lector! si no conocemos al Señor en forma de gracia, ¡no somos mejores que los demás en las exigencias de la naturaleza!