REFLEXIONES

No hay una reflexión más importante que se mantenga viva en la mente humana, que tanto la creación como el gobierno de todo el mundo de seres intelectuales y espirituales es para la gloria divina. La alabanza atribuida a Jehová en el cielo, corresponde a lo que todas las cosas nos enseñan aquí en la tierra. Señor, digno eres de recibir la gloria, la honra y el poder, porque tú has creado todas las cosas; y por tu voluntad existen y fueron creados.

¡Bendito Dios! Sea mi felicidad registrar tus alabanzas y hablar de todas las señales y maravillas que has obrado para redimir mi alma y las almas de todo tu pueblo, de la casa de la servidumbre espiritual, en el cumplimiento de que tú sometiste a Egipto y lo destruiste, y dispersaste a tus enemigos con mano poderosa. ¡Oh! que esté escrito en mi corazón con el lápiz del Dios viviente, que no es por nuestra fuerza, ni por nuestra fuerza, que nos has sacado; sino de tu diestra, de tu brazo y de la luz de tu rostro. De Jehová es la salvación, y tu bendición sobre tu pueblo.

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