CONTENIDO
Jesús, que pasaba por los campos de maíz en sábado, y sus
discípulos comían las espigas de maíz, provocó la ira de los
fariseos. Respuesta de Jesús. El sana la mano seca; llama a los
discípulos; hace milagros y predica.... [ Seguir leyendo ]
(1) Y sucedió que el segundo sábado después del primero, pasó por
los campos de maíz; y sus discípulos arrancaron espigas y comieron
frotándolas con las manos. (2) Y algunos de los fariseos les dijeron:
¿Por qué hacéis lo que no es lícito hacer en los días de reposo?
(3) Respondiendo Jesús, les dijo... [ Seguir leyendo ]
(6) Y sucedió que otro sábado entró en la sinagoga y enseñaba; y
había un hombre cuya mano derecha estaba seca. (7) Y le vigilaban los
escribas y los fariseos, si curaría en sábado; para encontrar una
acusación contra él. (8) Pero él, conociendo sus pensamientos, dijo
al hombre que tenía la mano sec... [ Seguir leyendo ]
(12) Y sucedió que en aquellos días salió al monte a orar, y pasó
toda la noche en oración a Dios.
Le rogaría que notara este versículo por sí solo. Hay algo muy
sorprendente en esas escrituras que se relacionan con el retiro de
nuestro Señor con el propósito de orar. La muestra que él ha hecho
que... [ Seguir leyendo ]
(13) Cuando se hizo de día, llamó a sus discípulos y escogió a
doce de ellos, a los que también llamó apóstoles; (14) Simón, (a
quien también llamó Pedro), y Andrés su hermano, Santiago y Juan,
Felipe y Bartolomé, (15) Mateo y Tomás; Jacobo, hijo de Alfeo, y
Simón llamado Zelotes; (16) Judas, herman... [ Seguir leyendo ]
(17) Y descendió con ellos y se detuvo en la llanura, y la compañía
de sus discípulos, y una gran multitud de personas de toda Judea y
Jerusalén, y de la costa de Tiro y Sidón, que venían a escuchar.
él, y ser sanados de sus enfermedades; (18) Y los que estaban
atormentados con espíritus inmundos, y... [ Seguir leyendo ]
(20) Y alzando los ojos hacia sus discípulos, dijo: Bienaventurados
los pobres; porque tuyo es el reino de Dios. (21) Bienaventurados los
que ahora tenéis hambre, porque seréis saciados. Bienaventurados los
que ahora lloráis, porque reiréis. (22) Bienaventurados sois cuando
los hombres os aborrecerá... [ Seguir leyendo ]
REFLEXIONES
¡Bendito Señor! Siempre que pase por los campos de maíz, ya sea en
sábado o en cualquier otro día, que el recuerdo de tu inigualable
ternura y condescendencia, en esas estaciones aquí representadas, me
lleve a la contemplación de tu gracia y amor por tus discípulos. Y
mientras veo a tus... [ Seguir leyendo ]