La respuesta suave apaga la ira, pero las palabras penosas avivan la
ira. La lengua de los sabios usa la sabiduría, pero la boca de los
necios derrama necedad. Los ojos del SEÑOR están en todo lugar,
mirando a los malos y a los buenos. La lengua sana es árbol de vida,
pero la perversidad en ella que... [ Seguir leyendo ]
Los labios de los sabios difunden conocimiento, pero el corazón de
los necios no lo hace así. El sacrificio de los impíos es
abominación al SEÑOR, pero la oración de los rectos es su deleite.
El camino de los impíos es abominación a Jehová, Mas él ama al que
sigue la justicia. La corrección es penos... [ Seguir leyendo ]
El corazón del entendido busca el conocimiento, pero la boca de los
necios se alimenta de necedad. Todos los días del afligido son malos,
pero el de corazón alegre tiene banquete continuo. Mejor es poco con
el temor de Jehová que gran tesoro y angustia con él. Mejor es una
cena de hierbas donde hay... [ Seguir leyendo ]
El hombre iracundo suscita contiendas, pero el lento para la ira
apacigua las contiendas. El camino del perezoso es como cerca de
espinos, pero el camino del justo es llano. El hijo sabio alegra al
padre, pero el necio desprecia a su madre. La necedad es gozo para el
falto de sabiduría, pero el ente... [ Seguir leyendo ]
REFLEXIONES.
¡LECTOR! Deténgase conmigo en el repaso de este capítulo, y
marquemos juntos las mejoras que un corazón, enseñado por la gracia,
puede hacer fácilmente con él. Para un ojo iluminado, que discierne
a Cristo en todo el campo de las Escrituras, no hay una flor en ella,
pero producirá tant... [ Seguir leyendo ]