Por el deseo, el hombre, habiéndose separado de sí mismo, busca y se
entromete con toda sabiduría.
Más bien acepto las expresiones en este versículo como refiriéndose
primero a la persona de Cristo en su naturaleza humana, y luego en él
a todo su pueblo. Los deseos de Jesús eran totalmente de este... [ Seguir leyendo ]
Al necio no le agrada la inteligencia, sino que su corazón se
descubra a sí mismo. Cuando viene el impío, también viene el
desprecio, y con ignominia el oprobio. Las palabras de la boca del
hombre son como aguas profundas, y la fuente de la sabiduría como un
arroyo. No es bueno aceptar la persona de... [ Seguir leyendo ]
La riqueza del rico es su ciudad fuerte, y como un alto muro en su
propia vanidad. Antes de la destrucción, el corazón del hombre es
altivo, y antes de la honra, la humildad. El que responde a un asunto
antes de oírlo, es necedad y vergüenza para él. El espíritu de un
hombre sostendrá su enfermedad;... [ Seguir leyendo ]
El que es el primero en su propia causa, parece justo; pero su vecino
viene y lo escudriña. La suerte hace cesar las contiendas y decide
entre los poderosos. Un hermano ofendido es más difícil de ganar que
una ciudad fuerte: y sus contiendas son como las barras de un
castillo. El vientre del hombre... [ Seguir leyendo ]
REFLEXIONES.
¡Lector! qué bendición es sentarse bajo la enseñanza del Espíritu
Santo; y mientras este libro de Dios aparece verdaderamente en
parábolas, y debe continuar tan inexplicable, hasta que Jesús por su
Espíritu lo abra a nuestro entendimiento, para que seamos guiados
desde allí para ver, l... [ Seguir leyendo ]