El corazón del rey está en la mano del SEÑOR como arroyos de aguas;
él lo vuelve a donde quiere.
No cabe duda de que todos los corazones y todos los caminos de los
hombres, como la corriente de las aguas, están sujetos a la
dirección divina; y los que son hechos reyes y sacerdotes para Dios y
el Pa... [ Seguir leyendo ]
Todo camino del hombre es recto en su propia opinión, pero Jehová
pondera los corazones. Hacer justicia y juicio es más agradable al
SEÑOR que el sacrificio. La mirada en alto, el corazón orgulloso y
el arado de los impíos es pecado. Los pensamientos de los diligentes
tienden sólo a la abundancia; p... [ Seguir leyendo ]
Mejor es vivir en un rincón del terrado, que con mujer rencillosa en
casa espaciosa. El alma del impío desea el mal; su prójimo no halla
gracia ante sus ojos. Cuando el escarnecedor es castigado, el simple
se hace sabio; y cuando se instruye al sabio, adquiere conocimiento.
El justo considera sabiam... [ Seguir leyendo ]
Hay tesoro que desear y aceite en la morada de los sabios; pero el
necio lo gasta.
¿Qué tesoro es éste, sino el que se deriva de él, en quien están
escondidos todos los tesoros de la sabiduría y el conocimiento?
Colosenses 2:3 . ¿Y cómo lo gastan los necios? Seguramente, al
despreciar su gran salva... [ Seguir leyendo ]
El que sigue la justicia y la misericordia, halla la vida, la justicia
y la honra. El sabio escala la ciudad de los valientes, y derriba la
fuerza de su confianza.
¿No están marcadas estas cosas en oposición a lo que se dijo del
necio que fue antes? Seguramente es sabio el que sigue a Jesús, que
es... [ Seguir leyendo ]
El que guarda su boca y su lengua guarda su alma de angustias.
Orgulloso y altivo escarnecedor es su nombre, que se ofrenda con
soberbia ira. El deseo del perezoso lo mata; porque sus manos se
niegan a trabajar. Codicia todo el día, pero el justo da y no
perdona. El sacrificio de los impíos es abomi... [ Seguir leyendo ]
REFLEXIONES
¡Lector! en medio de la mirada mezclada que este Capítulo ofrece de
la gracia y la corrupción, en todos sus efectos y consecuencias
opuestos, así como en su origen y terminación, ¡oh! para que Dios
el Espíritu Santo sea nuestro maestro, para darnos un entendimiento
correcto en todas las... [ Seguir leyendo ]