Explicación, estudio y comentario bíblico de Daniel 2:24-28 verso por verso
Después de esto, Daniel entró a la presencia de Arioc, a quien el rey había comisionado para hacer perecer a los sabios de Babilonia. Fue y le dijo así: — No hagas perecer a los sabios de Babilonia. Llévame a la presencia del rey y yo declararé al rey la interpretación.
Entonces Arioc llevó apresuradamente a Daniel a la presencia del rey y le dijo así: — He hallado un hombre de los cautivos de Judá, quien dará a conocer al rey la interpretación.
El rey habló y preguntó a Daniel, cuyo nombre era Beltesasar: — ¿Podrás tú darme a conocer el sueño que tuve y su interpretación?
Daniel respondió en presencia del rey diciendo: — El misterio sobre el cual el rey pregunta, ni los sabios ni los encantadores ni los magos ni los adivinos lo pueden declarar al rey.
Pero hay un Dios en los cielos, quien revela los misterios. Él ha hecho saber al rey Nabucodonosor lo que ha de acontecer en los postreros días. Tu sueño y las visiones de tu cabeza en tu cama son estos: