Explicación, estudio y comentario bíblico de Deuteronomio 2:30-31 verso por verso
Pero Sejón, rey de Hesbón, no quiso que pasáramos por su territorio, porque el SEÑOR tu Dios había endurecido su espíritu y obstinado su corazón para entregarlo en tu mano, como en el día de hoy.
“Entonces me dijo el SEÑOR: ‘Mira, yo he comenzado a entregar delante de ti a Sejón y su tierra. Comienza a tomar posesión de su tierra’.