Explicación, estudio y comentario bíblico de Deuteronomio 32:5-6 verso por verso
La corrupción no es suya; de sus hijos es la mancha, generación torcida y perversa.
¿Así pagan al SEÑOR, pueblo necio e insensato? ¿Acaso no es él tu Padre, tu Creador, quien te hizo y te estableció?