(griego, «kupros», «cobre»).
Isla montañosa situada en el nordeste del mar Mediterráneo y antiguamente famosa por sus minas de cobre, en un tiempo arrendadas a Herodes el Grande (Josefo, Ant., 16:4, 5).
Sus primitivos habitantes descendían de Quitim, rama de la raza griega (Gn. 10:4), pero después fue colonizada por los egipcios.
Existían allí numerosos grupos de judíos (Hch. 4:36).
Antes del martirio de Esteban ya había cristianos de Cipro, y durante la persecución que siguió, muchos de ellos volvieron a la isla predicando el evangelio (Hch. 11:19, 20).
Fue visitada por Bernabé y Pablo (Hch. 13:4) y más tarde por Bernabé y Marcos (Hch. 15:39).
Hoy se llama Chipre.